Vigilia Pascual

VIGILIA PASCUAL
ESTA NOCHE ES DISTINTA PORQUE…

La experiencia de la Pascua se vive siempre con otros, en comunidad, en cada gesto de afecto, de esperanza, de ayuda, en cada momento que damos y recibimos vida.
Esta noche es distinta a todas las noches, porque es la noche de la vida, la noche en que las promesas de amor de Dios a la humanidad se cumplen en la historia, porque hoy experimentamos en Jesús Resucitado el amor que Dios tiene por toda la creación, porque esta noche somos liberados, sanados, salvados, porque hoy sabemos que la vida, el amor, la esperanza, el bien, la belleza, son capaces de vencer cualquier miedo, dolor, error, fracaso y muerte.
Esta noche es distinta, es una noche santa porque somos parte de un todo, que nace con la misma creación de cuanto existe, y que recorre toda la historia, como nos dicen las lecturas del Antiguo Testamento hoy, una experiencia profunda de relación del ser humano con Dios, el cual va revelándose a sí mismo a través del tiempo, como un Dios de amor, de vida, de cuidado, de ternura, de promesa, un Dios padre y madre del ser humano, que nunca lo abandona en la búsqueda de su plenitud y su bien.
Esta noche es noche de alegría, alegría nace de los labios y del corazón desbordando todas nuestras ruinas y miserias, superando y venciendo todos nuestros miedos de muerte, todas las lágrimas y dolores cotidianos, sabiendo que la muerte, el dolor, el sufrimiento, no tienen la última palabra… que la palabra definitiva está en una risa de Amor, en el abrazo de Dios a Jesucristo por el que lo devuelve a la vida, y una vida plena. Y con la Resurrección de Jesucristo nace la esperanza de que nuestros seres queridos que en días recientes partieron de nuestro lado, ahora gocen de esa alegría eterna. Así, la tristeza por no verlos nuevamente se convierte en alegria de fe, de amor, y de esperanza de que algún día participaremos de la gloria de Dios.
Esta noche es distinta a las demás porque se nos regala el poder celebrar ese misterio profundo de vida que vence a la muerte, ese misterio de amor, ese misterio de liberación y de salvación. El liberarnos de todo lo que no nos deja crecer. Liberarnos del miedo, de la muerte, del sinsentido. Porque celebramos la salvación, y celebramos la posibilidad de convertirnos en el sueño que Dios tiene para cada uno de nosotros, la posibilidad de que nuestra vida se llene realmente de vida.
Esta noche es distinta, porque es la noche en que las promesas del amor de Dios a la humanidad se cumplen en la historia, porque hoy experimentamos en Jesús el amor que Dios tiene por toda la creación, llegando ese amor hasta nosotros.
Creer en la resurrección, es creer en el Dios de la vida. El deseo ardiente del corazón de vivir y vivir siempre tiene en la resurrección de Jesús la respuesta adecuada por parte de Dios. La muerte ha sido vencida, está consumada, ha sido transformada en vida por medio del Dios que Jesús defendió hasta la muerte. ¡Felices Pascuas de Resurrección!

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